Open mind del auditor forense en la investigación

Margot E. Fuentes Pérez,
M.B.A., C.P.A., E.F.A., A.F.A., docente universitaria (Panamá)
Miembro de la Comisión de Peritaje Contable y Auditoria Forense – AIC

El contador público autorizado (C.P.A.) es un profesional que mantiene una formación continua, técnica y con la idoneidad de dar fé pública; y como auditor forense desarrolla nuevas pericias, habilidades y competencias requeridas para apoyar en la lucha contra distintos flagelos, como el fraude y la corrupción. 

OPEN MIND. La pericia del auditor forense incluye tener una mente abierta (open mind), desarrollando un escepticismo profesional ante cualesquier posibles actos ilícitos y conductas de los perpetradores, teniendo una visualización de los escenarios donde haya indicios o sospechas, desarrollando una investigación desde de las fuentes de las pruebas idóneas sustentadoras de los hechos investigados y su evaluación para la determinación de los resultados que serán plasmados en su informe pericial.   

VISUALIZACIÓN. Esta open mind del auditor forense involucra el poder de la visualización de los posibles hechos perpetrados. Con esta visualización diseña un mapeo donde estos hechos pueden impactar en el core empresarial, sus operaciones, su estructura financiera, organizacional y de control, entre otros.  Este mapeo incluye la identificación de cada uno de los procesos donde un perpetrador pueda crear oportunidades y vulnerar los controles internos para su beneficio personal en detrimento de la organización.

INVESTIGACIÓN. Esta open mind también le permite al auditor forense diseñar su técnica de investigación basada en los posibles indicios o sospechas de actividades ilícitas.

 

El auditor forense planificará su investigación estratégicamente en base al objetivo y alcance de la auditoría, para su posterior ejecución y evaluación de las sospechas o indicios identificados y la vulnerabilidad de los controles internos en los procesos, determinando el impacto económico, las personas relacionadas, las evidencias idóneas, lícitas, suficientes y pertinentes que sustentarán los hechos investigados.  El auditor forense establece una metodología acorde con las etapas de auditoría basada en un método científico. Esa metodología puede incluir como proceso de investigación:

  1. La identificación del indicio o sospecha, naturaleza u origen.
  2. La formulación de los escenarios del acto ilícito.
  3. Obtención de la información mediante procedimientos y técnicas de auditoría.
  4. El análisis y evaluación de información obtenida.
  5. La determinación de los resultados y su conclusión plasmada en el informe de auditoría forense.

En el proceso de investigación se pueden planificar y ejecutar diferentes procedimientos de auditoría como la inspección, la observación y la indagación, entre otros, cuya referencia técnica se encuentra en la NIA 500.

ESCEPTICISMO PROFESIONAL.  La open mind incluye el escepticismo profesional. De referencia técnica están las Normas Internacionales de Auditoría (NIA) publicadas por la Federación Internacional de Contadores (IFAC), Escepticismo profesional en la NIA 200, para el Fraude y los Factores de riesgos de fraude, motivación, presión, oportunidad, en la NIA 240.

El auditor forense desarrolla lo que se denomina como olfato para identificar las posibles actividades ilícitas.

Las investigaciones de estas actividades ilícitas o de flagelos como fraude y corrupción ameritan tener open mind que se relacionan entre sí.  Tenemos como referencia técnica el esquema o árbol del fraude, modelo proporcionado por la Asociación de Examinadores de Fraude Certificados (ACFE); el cual tiene una clasificación del fraude con tres factores: Corrupción, Apropiación de Bienes y Cuentas Fraudulentas.  La corrupción es subclasificada en Conflicto de interés, Gratificación ilegal, Soborno y Extorsión económica.

A través de los años, la corrupción ha penetrado, tanto en el sector gubernamental como en el sector privado.  No es fácil erradicar la corrupción, pero se puede iniciar el proceso para mitigarla, hasta lograr su eliminación por segmentación o total en cualquier entorno organizacional.  Es como el maligno del cáncer, hay que hacer un diagnóstico preventivo que puede salvar la vida y si no se detecta a tiempo puede representar la muerte del ser vivo. Ese diagnóstico representa la ¡PREVENCIÓN! en las organizaciones.

ESCENARIOS PREVENTIVOS. El rol activo en la lucha contra la corrupción, sea como sociedad civil, sectores empresariales o gubernamentales, organismos de profesionales, medios de comunicación, etc., debe impulsar la creación de estructuras fuertes que no permitan que las grietas que crea la corrupción vayan deteriorando los pilares fundamentales que nos sostienen como sociedad o país. Como mencioné en un escrito anterior, Auditor Forense: Antídoto contra la Sombra del Perpetrador, es importante que trabajemos en los tres pilares de la Prevención, denominados como las tres (3) C de la Prevención: Conducta Ética, Control Interno y Cultura de Transparencia y Rendición de cuentas.  No hay que permitir que las grietas creadas en estos pilares, por la corrupción de los perpetradores, sigan creciendo y evitar el derrumbe de nuestras organizaciones.

El auditor forense apoya en la prevención con la open mind, aplicando durante la auditoría los principios fundamentales del Código Internacional de Ética para Contadores Profesionales publicado por el IFAC, en su sección 110: integridad, objetividad, competencia profesional y debido cuidado, confidencialidad y comportamiento profesional.

 

En toda organización se debe impulsar un gobierno corporativo robusto y con una cultura organizacional basada en la ética. Aquellas organizaciones que no tengan los recursos financieros, ni humanos para establecer los mecanismos para mantener una cultura basada en valores y principios éticos, pueden considerar como guía estos Principios Fundamentales; creando la confianza, transparencia, sostenibilidad y valor agregado en la toma de decisiones de todos los servicios que se desarrollen. 

Toda organización puede implementar simples mecanismos preventivos basados en la ética y controles:

  1. Emitir un Código de ética y de conducta de aplicación para todos los niveles organizacionales.
  2. Diseñar los manuales de procedimientos y controles internos para todos los procesos y departamentos.
  3. Establecer políticas financieras y administrativas.
  4. Desarrollar una planeación estratégica con presupuestos, kpis y rendición de cuentas.
  5. Establecer un control de calidad y de monitoreo.

¡Impulsemos la OPEN MIND hacia una Cultura Organizacional de Ética, Integridad, Transparencia y Rendición de Cuentas!

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