Inteligencia Artificial:  Una oportunidad para potenciar el talento profesional

Por Patricia Llanos Ocampo

Miembro de la Comisión Técnica de Administración y Finanzas – AIC

Si nos detenemos por un momento a observar  nuestra rutina diaria podremos apreciar que,  de forma  natural,  ya estamos utilizando inteligencia artificial (IA);  cuando interactuamos por ejemplo en el WhatsApp con nuestros proveedores de servicios de salud, banca  y telefonía móvil, donde usualmente nos responden robots programados para absolver consultas básicas en base a un cuestionario mínimo; cuando nos conectamos a Netflix  y nos recomienda alternativas de películas que nos pueden interesar en base al estudio que han hecho de lo que hemos venidos seleccionado en esa plataforma; cuando revisamos nuestros correos y vemos clasificados nuestros emails en prioritarios y no deseados basados en nuestras preferencias; cuando buscamos una dirección en Google Maps y nos orienta como podemos llegar al lugar  también estamos usando IA. Lo mismo sucede en las compras online cuando aparecen los chabots y nos ofrecen productos que son importantes o deseados para nosotros;  cuando utilizamos los asistentes de voz, etc.

 

Es fascinante darse cuenta cuan cerca de nosotros esta este tipo de tecnología exponencial descrita como “máquinas o procesos con inteligencia similar a la de los humanos, habilitados a través de algoritmos de aprendizaje mecanizado”. La IA  se basa en redes neuronales semejantes a la estructura del cerebro humano y  analiza datos  en un gran volumen, los modela a través de algoritmos (modelos matemáticos)  pudiendo concluir y decidir casi como un humano. Esta tecnología que la utilizamos cotidianamente, como ya hemos visto, también podríamos aplicarla en nuestro quehacer profesional, un reto que el futuro inmediato nos presenta como una oportunidad que genera sinergias para potenciar el crecimiento y productividad de los talentos.

 

Muchos creen que la inteligencia artificial representa una amenaza para muchos puestos actuales de trabajo, otros, sin embargo, están convencidos de que generará un impacto positivo sobre el mercado laboral y hay que estar preparados para las nuevas demandas de trabajo, pues la IA será la tecnología dominante en el futuro cercano.

 

Las profesiones que hoy existen muchas posiblemente se mantendrán pero tendrán que adaptarse a la convivencia con robots y máquinas, creándose una simbiosis entre lo actual y el futuro. Al conocimiento y las habilidades de los profesionales en boga tendrán que añadirse las competencias digitales: Comunicación, empatía y creatividad, entre otras,  y formarse las profesiones del futuro, asimismo se tendrá que unir el conocimiento de inteligencia artificial con el conocimiento de la inteligencia emocional.

 

Es necesario saber que la inteligencia artificial funcionará correctamente si se conjugan tres aspectos importantes: Machine learning (Aprendizaje automático), Deep learning (Aprendizaje profundo) y PNL (Procesamiento de lenguaje natural). El primero aplica patrones de manera autónoma para aprender a partir de la información que se graba en la base de datos; el segundo permite identificar relaciones y asociaciones  analizando la información a través del aprendizaje de la máquina; y el tercero permite que los Bots comprendan y repliquen el habla humana, lo que siente el cliente con relación al producto o servicio adquirido.

 

El Profesional contable no es ajeno a este panorama cibernético y tendrá pues que ingresar al mundo tecnológico, en donde la IA facilitará sus labores e incrementará su productividad a través de: a) Agilidad y ahorro de tiempo, eliminando tareas repetitivas que consumen muchas horas para optimizar procesos b) Generación de datos oportunos y de calidad para resolver los problemas contables c) Mejor control, precisión y eficiencia a través de la reducción de errores y riesgos.

 

Si bien la IA está iniciándose en el mercado contable, existe un gran potencial.  Actualmente se cuenta con softwares contables con aprendizaje automático y resultados mecanizados, por ejemplo, la entrada de datos para conciliaciones o para generar comprobantes y libros electrónicos; también ya circula una versión del Excel con IA para analizar datos de forma asombrosa. El Profesional contable que se comprometa a hacer uso de la IA y liberar su tiempo para actividades de análisis y de raciocinio complejo, podría empezar identificando aquellos procesos repetitivos para automatizarlos, procesos entre otros como los siguientes:

 

  • Cálculo y liquidaciones de impuestos
  • Procesos de auditoría, puntos de control. Por ejemplo, los drones con IA para reconocimiento visual en un Inventario físico o la auditoría del 100% de los documentos y ya no por muestras.
  • Análisis de información financiera
  • Cálculo y liquidación de sueldos
  • Registros de compras y ventas en base al análisis automático de los comprobantes, hasta su registro en libros contables y estados financieros.
  • Desarrollo de pronósticos
  • Acciones preventivas en base a tendencias y comportamientos

 

En esta implementación el profesional contable, que proporcionará la información del proceso que quiere automatizar y sus reglas, tendrá que trabajar en equipo con otros profesionales especialmente dedicados a la IA tales como el científico de datos, el ingeniero de aprendizaje automático, el diseñador de personalidad y el guionista de personalidad, ¿te suenan conocidos estos nombres? Pues son las profesiones que ya destacan y destacarán en el futuro, inexorablemente.

 

La implementación de soluciones con IA suele ser mas sencilla de lo que se cree, necesita, según los expertos “de un portal de internet, un sistema de medición de tráfico y una estrategia digital”. Si bien el costo de implementación puede resultar aún elevado para los pequeños consultores contables con el tiempo se hará más accesible. No obstante, lo más importante y difícil de conseguir es el cambio cultural, estar decididos a innovar y ser más eficientes, arriesgar por la tecnología e identificar y mapear esos procesos repetitivos y robotizarlos.

 

¿Estás dispuesto a asumir el reto y lanzarte a la piscina cibernética?  Pues sólo piensa en un proceso rutinario del que te gustaría liberar tiempo de trabajo, mapéalo, elabora una lista de tareas, identifica los inputs de datos y sus salidas, desarrolla los cálculos o las fórmulas que pudiera necesitar el proceso, las reglas decisorias frente a tal o cual resultado. Por ejemplo, para el análisis de estados financieros con Indicadores o ratios, puedes utilizar IA no solo para determinar los resultados de dichos Indicadores, sino que a través de ellos plantees una interpretación y una solución automática, que revisarás y ajustarás hasta que los resultados e interpretaciones  estén libres de errores, recuerda que la IA aprende y no vuelve a cometer el mismo gazapo o equivocación.

 

¿Necesitas un asistente virtual para tus clientes, que pueda responder en tiempo real, un cuestionario básico de temas contables, tributarios, laborales, o financieros; y que refleje que eres un profesional moderno? Es increíble, pero se puede desarrollar y delegar ciertas consultas básicas; y hay que tener en cuenta que aparte del conocimiento y preguntas que pueda responder tendrás que dotarlo de una personalidad sintética y un lenguaje que refleje tu marca profesional para que se comunique eficiente y efectivamente con los usuarios.  En la siguiente tabla se presentan los tres pasos para diseñar la personalidad de un asistente conversacional, diseño que lógicamente estará a cargo de un experto con el que el profesional contable trabajaras en su desarrollo.

Tabla 1:

Proceso para definir la personalidad de un asistente virtual

La automatización inteligente de los procesos y tareas ayudará al profesional contable y le dará el tiempo necesario para orientar sus labores al asesoramiento, controles, mejoramiento de procesos y resolución de problemas financieros complejos y de crecimiento estratégico; y, casi con seguridad a través del trabajo remoto flexible y online, mejorando su calidad de vida profesional y familiar.

 

Finalmente, una reflexión transformadora: La IA llegó para “facilitar la vida y la seguridad”, es una frase que la encontré en el ciberespacio y que transcribo porque calza como anillo al dedo al tema en cuestión. En ello radica el papel de la IA y no en la amenaza de extinción de la profesión contable. Hay que verla a la IA con otros ojos como una herramienta tecnológica que hará que nuestras tareas se desarrollen con facilidad, agilidad y libre de errores.

 

De lo que se trata es eliminar el trabajo repetitivo y que consume tiempo para que el profesional contable se pueda concentrar en el análisis y solución de problemas que agreguen valor a su performance; y superar los retos de resistencia al cambio, costos, seguridad, personal capacitado y calidad de la data.

 

No hay que perder de vista que la originalidad y la creatividad son las facultades humanas más difíciles de automatizar. La diferencia también radica en que los humanos son empáticos, amables, colaboradores y más efectivos para solucionar cuestiones sensibles; la persona genera más confianza que una máquina y esta nunca podrá reemplazar a la inteligencia humana, solo la complementa, la enriquece. El ser humano es el que tendrá siempre el control de los robots.

 

Solo nos queda prepararnos cada vez más para ese futuro, que parecía lejano y de ciencia ficción, y que ya nos alcanzó. Transformémonos profesionalmente, vayamos de la mano con las tecnologías exponenciales, que serán el pan de cada día, profundicemos siempre los conocimientos de nuestra profesión con ética e incorporemos estudios de sistemas, desarrollemos nuestras habilidades blandas seamos siempre muy creativos y comunicativos, innovemos; en suma, seamos profesionales integrales y de calidad en ello radicará nuestra supervivencia.  No le tengamos miedo al manejo de los datos y su automatización,  adaptémonos a estos grandes cambios y apoyemos a los talentos de nuestra organización y entorno en esta transformación digital.

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