En el contexto de la economía globalizada del siglo XXI, la transparencia corporativa se ha convertido en una necesidad estratégica para las organizaciones y para...
Sepa másProducto de la pandemia generado por el COVID-19, el mundo entero se vio obligado a experimentar cambios que al margen de atentar con nuestras vidas seduce la presencia de otro enemigo invisible que los financieros combatimos para defender el principio de empresa en marcha, un enemigo que día a día, hora tras hora está cobrando fuerza y amenaza con destruir toda estructura organizacional y la salud económica de muchos países.
La coyuntura que enfrentamos exige nuestra presencia y entre muchas exigencias demanda evaluaciones financieras para predecir riesgos que comprometen el futuro de la organización y a responder preguntas como: ¿Que probabilidad de quiebra estamos enfrentando?, ¿Cuál es el nivel de riesgo? por citar algunas.
En el mundo de las finanzas se registran varios modelos destinados a medir el riesgo de quiebra, entre los que destacan: el modelo de Edward Altman, modelo del banco de Francia y el modelo de Conan y Holder.
En lo que compete al presente documento, orientaremos nuestro análisis al modelo presentado por el profesor de la Universidad de Nueva York: Edward I. Altman, por ser en muchos aspectos el más usado y con mayor registro de aceptación.
El primer planteamiento fue desarrollado sobre la base de una muestra de 66 empresas industriales, de las cuales una mitad quebró hace 20 años y la otra mitad continuaba operando a la fecha en que se realizó el estudio en 1968.
El modelo de Altman, se basa en el uso de ratios que, contrastados mediante un análisis discriminante múltiple, procura predecir la probabilidad de quiebra al que está expuesta una empresa de conformidad a la estructura financiera revelada en el Balance General y el Estado de Resultados.
El modelo consideró la aplicación de 22 razones financieras que abordaron las siguientes categorías:
El resultado final se constituye en una función discriminante reconocido en el mundo entero como: el “Modelo de estimación de quiebra Z – Score”, un algoritmo que registra un 95% de confiabilidad.
1. Activos corrientes, 2. Pasivos corrientes, 3. Activos totales, 4. Pasivos totales 5. Patrimonio neto, | 6. Valor de mercado del paquete accionario, 7. Ventas netas, 8. Gastos financieros, 9. Utilidad antes de impuestos 10. Resultados acumulados. |
Z = 1.20 (X1) + 1.40 (X2) + 3.30 (X3) + 0.60 (X4) + 1,00 (X5)
|
X 1 | = | Activo Corriente – Pasivo Corriente | |||||||||
Activos Totales | |||||||||||
X 2 | = | Resultados Acumulados | |||||||||
Activos Totales | |||||||||||
X 3 | = | Resultado Operativo | |||||||||
Activos Totales | |||||||||||
X 4 | = | Valor de mercado capital accionario | |||||||||
Valor en libros del pasivo total | |||||||||||
X 5 | = | Ventas | |||||||||
Activos totales |
Las razones financieras se multiplican por factores que una vez sumados producen un factor general denominado “Z”.
Objetivo del indicador X1:
Evaluar la capacidad para generar liquidez.
Objetivo del indicador X2:
Evaluación de los resultados acumulados y la posición de la administración para gestionar la reinversión de estos. (Una empresa con historia reportará índices altos)
Objetivo del indicador X3:
Evaluación de la capacidad operativa de generar recursos sustentables en el corto plazo.
Objetivo del indicador X4:
Ponderar el valor comercial del capital frente a la existencia de pasivos que atentan la solvencia de la empresa.
Objetivo del indicador X5:
Medir la capacidad de los activos para generar ingresos (Ventas).
La información que requiere el modelo se extrae de: Balance General, Estado de Resultados y de forma complementaria del valor de mercado de las acciones.
Rango del Indicador | Interpretación |
Mayores a: 3.00 | No existe problemas de solvencia en el corto y mediano plazo |
De: 2.71 a: 2.99 | Seguridad relativa y/o de observación |
De: 1.82 a: 2.70 | Con problemas financieros en el mediano y corto plazo, |
Menor a: 1.81 | Alto riesgo de quiebra |
La primera versión del modelo fue sustentada en empresas industriales cuyas acciones cotizaban en la bolsa de valores; esto generó críticas al modelo que derivó en modificaciones para su aplicación en empresas industriales, comerciales y de servicios que no cotizan en la Bolsa.
Producto de las modificaciones hechas al modelo original, surgen las siguientes alternativas:
La metodología deriva del modelo original y fue desarrollada para su aplicación en empresas industriales que no cotizan en Bolsa. La razón financiera de la variable X4, incorpora el valor contable del patrimonio en sustitución del valor de mercado del capital accionario.
Principales modificaciones:
Formula:
Z1 = 0.717 (X1) + 0.847 (X2) + 3.107 (X3) + 0.420 (X4) + 0.998 (X5)
|
Cobertura de Resultados del Modelo Z1:
Rango del Indicador | Interpretación |
Mayores a: 2.90 | No existe riesgo de insolvencia en el corto y mediano plazo |
De: 1.24 a: 2.89 | Seguridad relativa y/o de observación con probabilidad de quiebra según su aproximación al lumbral inferior. |
Menor a: 1.23 | Alto riesgo de quiebra |
La metodología deriva del modelo original y fue desarrollada para su aplicación en empresas comerciales y de servicios que no cotizan en bolsa.
Principales modificaciones:
Formula:
Z2 = 6.56 (X1) + 3.26 (X2) + 6.72 (X3) + 1.05 (X4)
|
Cobertura de Resultados del Modelo Z2:
Rango del Indicador | Interpretación |
Mayores a: 2.60 | No existe riesgo de insolvencia en el corto y mediano plazo |
De: 1.11 a: 2.59 | Seguridad relativa y/o de observación con probabilidad de quiebra según su aproximación al lumbral inferior. |
Menor a: 1.10 | Riesgo alto de quiebra |
El riesgo en un factor constante en toda organización, pero existen entre medio decisiones financieras que pueden ser adoptadas para mitigar su efecto.
Algunas de las decisiones destinadas y reducir este riesgo son:
Altman se constituye en una de muchas alternativas para realizar evaluaciones que nos permitan alertar sobre los riesgos de quiebra que muchas empresas deberán enfrentar durante y después de esta crisis que no fue invitada pero no puede ser eludida.
Debemos asumir que no es el primer reto y claro está que no será el último del largo camino que nos espera afrontar junto a nuestras organizaciones, un camino donde todos nos exponemos como factores vulnerables, pero al mismo tipo fuertes para afrontar los cambios de un mundo que se vio obligado a ser trasformado.
Preparado por: Omar Rivera Claros PBG
Miembro de la Comisión Técnica de Administracion y Finanzas
En el contexto de la economía globalizada del siglo XXI, la transparencia corporativa se ha convertido en una necesidad estratégica para las organizaciones y para...
Sepa másLos Recursos Humanos poco a poco han adquirido mayor relevancia dentro de las organizaciones, si bien ellas siempre han necesitado personal para llevar a cabo...
Sepa másImagine un mundo donde un algoritmo detecta un fraude de USD 50 millones antes de que el director financiero reciba la primera alerta. Este escenario,...
Sepa másLas microempresas, las pequeñas y medianas empresas (MIPYME) son fundamentales para la economía mundial, según la ONU, representan la mayor parte de las empresas del...
Sepa másEn el presente artículo se enfatiza la importancia de la competencia del profesional, al abordar las responsabilidades de la firma de auditoría para diseñar, implementar...
Sepa másLa Logística es el conjunto de actividades y procesos que se llevan a cabo para planificar, implementar el flujo eficiente y efectivo de bienes y...
Sepa másEl mundo financiero está experimentando una revolución con la llegada de la tokenización y los activos digitales. Estos conceptos, que hace unos años parecían pertenecer...
Sepa másEn medio de avances tecnológicos y un futuro cargado de incertidumbre, surge una pregunta que nos obliga a detenernos y reflexionar:¿Puede la inteligencia artificial llegar...
Sepa más